El pueblo Arhuaco recupera un territorio ancestral sagrado, arrebatado al narcotráfico


En un hito histórico, el pueblo Arhuaco de la Sierra Nevada de Santa Marta ha recuperado 227 hectáreas del predio "Los Acantilados", entregadas por la Agencia Nacional de Tierras (ANT) y la Sociedad de Activos Especiales (SAE). Esta restitución es de gran trascendencia ya que el terreno fue recuperado de manos del narcotráfico, habiendo pertenecido a Diego León Montoya, alias "Don Diego".

Más allá de ser una simple extensión territorial, esta entrega representa la reconexión del pueblo Arhuaco con su salida ancestral al mar Caribe, un espacio vital para su cosmovisión. Para ellos, el territorio, incluyendo el mar, no es solo un espacio geográfico, sino un ser vivo interconectado, una extensión natural de la Sierra Nevada que es fundamental para sus ceremonias, el equilibrio espiritual y la protección de la Madre Tierra.

El cabildo gobernador Arhuaco, Luis Enrique Salcedo Zalabata, enfatizó que esta recuperación es esencial para sus ceremonias y para el equilibrio espiritual. Esta acción no solo amplía el resguardo Katanzama y fortalece su cultura, sino que también contribuye a la protección de la Línea Negra, una delimitación espiritual y territorial de los pueblos indígenas de la Sierra. La entrega de este predio, que se suma a más de 1.257 hectáreas recibidas en menos de tres meses, es un paso significativo en la reforma agraria del país y en la sanación de la fractura histórica que los desconectó de su vínculo con el mar.

Voces de la restitución

Juan Felipe Harman, director general de la ANT, destacó la trascendencia de este momento: "La entrega de este predio, hecha en un acto apartado por completo de la opulencia, como es nuestro proceder, es una victoria espiritual y cultural. Volver al mar es volver a un centro perdido. Como Agencia Nacional de Tierras, estamos cumpliendo la palabra del presidente Gustavo Petro Urrego y garantizando que el territorio deje de ser un sueño y vuelva a ser realidad para los pueblos indígenas".

Por su parte, Amelia Pérez Parra, presidenta de la SAE, resaltó el valor simbólico de la entrega: "Este predio tiene una connotación especial porque fue incautado a Diego León Montoya, alias 'Don Diego', señalado por las autoridades de ser uno de los cabecillas del narcotráfico. Fue puesto a disposición de la SAE y hoy se entrega al pueblo Arhuaco, lo que representa un acto de justicia histórica y reparación simbólica, al transformar un bien ligado al crimen en un espacio de vida, espiritualidad y reconstrucción cultural".